domingo, 21 de septiembre de 2008

MESA REDONDA (Postgrados, 2004)

“APORTES PARA UNA POLÍTICA DE POSTGRADOS EN FACULTAD DE PSICOLOGÍA”

INVITADOS: DECANO PROF. PSIC. VICTOR GIORGI
PSIC. LUIS LEOPOLD
PSIC. JOAQUIN RODRIGUEZ NEBOT
MODERADOR: PSIC. ENRICO IRRAZABAL
Organiza: Curso de Universidad e historia de la Psicología en el Uruguay)


Presentación de la mesa a cargo del Psic. Enrico Irrazabal.

E: Pensamos que este tema tiene mucho que ver con la Reglamentación de la Profesión porque los postgrados de alguna manera van a ir demarcando los viejos y también los nuevos campos de trabajo del psicólogo. Esto dependerá de nuestra capacidad y del tipo de especialización que generemos, también en el marco de esta ley, qué tipo de psicólogo se mueve, cómo trabaja.
Como el tema además no solo tenía que ver con los contenidos del Curso de Universidad e Historia de la Psicología de 1er. Ciclo, pensamos en hacerlo extensivo a los otros Ciclos.
Sé que hay algunas actividades en Facultad que tiene un nivel de convocatoria importante, evidentemente esta no lo es, pero sí queremos informar que nosotros recorrimos los caminos formales para la divulgación de la información y bueno, nos apena que no haya mas compañeros.
Bueno, “Aportes para una política de postgrados en Facultad” busca ser eso, indagar, intentar delinear aspectos de una política de postgrados, que no lo inicia evidentemente Universidad e Historia de la Psicología ya que está es una discusión en Facultad, hay comisiones en el Claustro que hace años que vienen funcionando, ha ingresado varias veces el tema en el Consejo y ha sido discutido en los diferentes gremios de los órdenes de nuestra Facultad. Por lo tanto lo que se busca hacer son aportes.
Los invitados para exponer sobre el tema son:
El Decano de Facultad: Víctor Giorgi (V.G.) que es la figura que representa a nuestra Facultad y quien participa en distintos lugares, en particular en la Universidad, con esto hago referencia a que va a ser bien clave para el proceso de este tipo de discusión y además es el que mantiene las relaciones con la Región y en todas las temáticas y en particular la de postgrados. Además Víctor en las distintas instancias de cogobierno que participó tiene planteos al respecto que me parecen claros para iniciar esta mesa. Con esto quiero decir que hay un interés claro del decanato de implementar los postgrados en Facultad.
Por estos criterios o razones, nos parecía que tenía que estar Víctor en la mesa, así que agradecemos que esté presente, sabemos que vino desde otro lado y llegó rápidamente.
El otro invitado es el Prof. Adj. Joaquín Rodriguez (J.R.), de Técnicas Psicoterapéuticas. Nuestro interés en la participación de Joaquín tiene que ver con varios elementos, uno de ellos es que por su experiencia de vida él ha estado en otros países y esto tiene algunos beneficios secundarios, conocer otras realidades, otras organizaciones universitarias y aspectos que tiene que ver con los postgrados, entonces nos puede ayudar a pensar desde otra óptica. Además no sé si eras o sos integrante de la Comisión sobre Reglamentación de la Psicoterapia.

J.R.N.: Estuve.

E: Estuvo un tiempo, que fue donde se dio una discusión muy dura, que ustedes recordarán se realizó en Facultad, que tenía que ver con la posibilidad de reglamentar la Psicoterapia y eso quedó detenido mientras se discutía y se reglamentaba la profesión. Nosotros pensamos que lo de las psicoterapias tiene que ver con las prácticas y debe ser uno de los aspectos contemplados dentro de los postgrados. Él estuvo en discusiones relacionadas con estos temas y además porque justamente trabaja en técnicas psicoterapéuticas. Nos pareció interesante porque como en el caso de Luis, podíamos incorporar compañeros que están trabajando en otros Ciclos muy diferentes a 1er. Ciclo.
El otro invitado es el Encargado de Psicología Laboral, es decir el Prof. Adj. Luis Leopold (L.L.). En al caso de Luis, pensamos que era bueno el ingreso de otra generación a la discusión. Luis además es un compañero que de alguna manera es parte de una generación que incursionó en la vía de los postgrados. Tiene un postgrado en Gerontología Social en Chile. Ha habido un proceso dentro de la psicología y es que una serie de docentes comenzaron a hacer postgrados en el exterior porque no existía una dinámica común en nuestro país dentro de la historia de la psicología. Entonces nos parecía bueno que nos pudiera contar también su experiencia, porque como ustedes saben al hacer un postgrado uno trabaja sobre los contenidos de este, pero también transcurre y ve cómo funcionan y se organizan los postgrados. A su vez desde Psicología Laboral creemos que puede mostrar o llegar a ver otros ámbitos distintos a los que nos va a mostrar Víctor o Joaquín.
Había otros invitados: Susana Goldstein y Guillermo De la Hanty que no están en el país. Pensamos en Guillermo porque queríamos que nos contara su experiencia mexicana, aunque nos llegaron algunos aportes por escrito sobre el tema. Creo que no me olvido de nadie más.
Si les parece bien, comenzamos. La idea es que trabajen 15 minutos, si necesitan más tiempo les será otorgado gratuitamente y después lo que pedimos es comenzar a discutir, no hacer de acuerdo con lo que ellos van a decir sino generar una problemática en torno a los postgrados y ver lo que aquí se despliega.

Luis Leopold: Bueno, primero que nada, muchas gracias por la invitación. Un poco contradiciendo a Enrico me parece que no hay poca gente. Diríamos somos los que somos y veremos lo que hacemos.
Yo lo primero que quiero decir, no sé si lo que quiero plantear se ajustará a lo que esperaban en función de la presentación que hizo Enrico, pero es lo que yo estuve preparando y lo que me interesaba compartir con ustedes sobre el tema de los postgrados.
Volviendo al título de esta mesa, yo tiemblo cada vez que escucho la palabra “política”, no porque sea una mala palabra, sino por que la asocio enseguida con el tema de formar una Comisión, que se reúne, que esto pasa a una serie de asambleas, que después se elabora un proyecto..y en realidad me suena a que se nos va la vida. Obviamente que las políticas son importantes en lo que hace a poder definir determinados lineamientos que tengan cierto grado de coherencia y articulación con otras políticas y con otros proyectos de Institución, en este caso de la Facultad y de la Universidad. Quisiera tomar el tema de las políticas en el camino que la Facultad está, si es que empujamos entre todos, próximo a resolver el tema de los postgrados. Próximo en función de realidades operativas, es el año 2001, para que el año 2001 sea una realidad operativa en el tema de los postgrados, no tenemos mucho tiempo. Últimamente me ha gustado la expresión de que la Facultad es una de las principales responsables de la construcción de la imagen social de la profesión de psicólogos en este país. Quiero señalar, para marcar el tema de los postgrados, dos aspectos que me parecen importantes para cruzar la formación de grado y de postgrado de esta Facultad, que se podrá o no plantear que algunos están formados, o todos, pero yo quiero explicitarlo.
Algo que hemos repetido mucho es que necesitamos formar psicólogos con determinadas competencias. Citando algunos autores brasileños (Botomé, Sanelli): competencias técnicas. Tenemos que ser competentes como para utilizar técnicas y lo que es más importante para construir técnicas y no quedar entrampados en la idea que el único camino que hay ante las técnicas es aprenderlas porque siempre las van a diseñar otros. Tenemos que ser competentes en el trabajo metodológico. Es decir, poder ubicar esas técnicas dentro de proyectos metodológicos y también salir de la base de que los métodos se construyen. Y en 3er. lugar tenemos que ser competentes políticamente, esto es, salir de la base de que tenemos una determinada inserción y pertenencia social que entre otras cosas nos define con responsabilidad social. Esto, en el desarrollo del camino profesional implica que podemos como estudiantes y como profesionales, ejercer, podemos practicar la profesión, muchas veces esto está ligado a los honorarios, remuneraciones ridículas o a veces también a bien pagas. Pero implica poder sistematizar. Me importa remarcar este tema, poder escribir como un elemento clave del desarrollo profesional. Esto, muy vinculado a la Universidad pero no solo poder investigar, poder ubicar estas prácticas profesionales dentro del proyectos de producción de conocimiento. Este es un elemento importante, tanto en la formación de grado como en la de postgrado.
El otro elemento es, siendo precisos, la formación de los psicólogos, la Facultad tiene que profundizar una formación critica respecto al liberalismo. Vivimos en un contexto de un capitalismo que tiene un modelo hegemónico, necesitamos discutir el tema del liberalismo y el neoliberal en la formación, no reducido a un elemento político, sino incorporando los elementos filosóficos, económicos. Flaco favor les hacemos a los desarrollados del liberalismo que rigen hegemonizando nuestras vidas cotidianas, sino desarrollamos estas líneas de criticidad, en algunos casos de terribles males, en otros podrán ser de rendijas, pero la formación de profesionales universitarios tiene que apuntar a desarrollar niveles de criticidad sobre el régimen social en el que se vive.
Yo planteo estos dos elementos de partida porque me interesa ubicar un esquema que es como yo ubico este tema de los postgrados. Para mi implica articular 3 aspectos: uno es la jerarquización docente, otro es el plan de estudios y estructura y otro es postgrados.
Pienso que la consideración de los postgrados hay que articularla con los otros dos elementos. Obviamente, esto introduce otro elemento, que en la Facultad no tenemos en este momento, o por lo menos es mi valoración, una evaluación y ajuste del proyecto institucional.
Yo soy un docente que cuando el año pasado o el otro, se planteó el tema de la evaluación o ajuste del plan de estudios consideré metodológicamente que había que salir de la base, no de ajustar algo, ajustar un poco más...la otra opción es discutir radicalmente el proyecto. A mi me parece que la discusión de evaluación del proyecto institucional tiene que implicar discusión a fondo, lo que ocurre que desde mi punto de vista nos genera una serie de pánico de que si nos metemos a evaluar o ajustar se nos puede caer todo.
Estamos viviendo una revolución tecnológica por año (lo dicen algunos autores y es fácil probarlo). Nosotros, y ya lo he dicho, tenemos que aplaudir este proyecto. Yo soy docente desde....bueno ingresé a estudiar psicología en el 81’, soy docente aquí y me parece que este plan de estudios, esta estructura es la mejor que la psicología universitaria ha logrado. Pero en algunos aspectos ya es vieja. Nosotros no podemos simplemente festejar que tenemos un plan de estudios, una estructura que ya anda por los 12 años. Esto implica tener algún sistema de evaluación y ajuste periódicos. Que la Facultad y todos conozcamos las reglas de juego, Facultad en la que además participamos todos los órdenes. Poder cada 3, 4 o 5 años realizar ajustes en el Plan de estudios de grado, con la jerarquización de la estructura y con algo que preguntaba la gente de Historia con respecto a que postgrados realizar.
En concreto, en lo que hace a estos contenidos vinculo estos 3 aspectos porque me parece que a nivel de la jerarquización, no hay desarrollo académico de fondo en esta Facultad, entonces, si nosotros no jerarquizamos el plantel docente que tenemos desde mi punto de vista estarían implicadas básicamente 2 cosas: nombro la segunda en importancia y que es lograr incorporar profesionales y docentes prestigiosos que no están en facultad y que se puede contar con ellos, la primera y la más importante (por los niveles de implicación, pido disculpas) es reconocer y jerarquizar los docentes que tenemos en esta Facultad. Nosotros no podemos aspirar a determinado reconocimiento, mayor del que tenemos en el medio y en la región, sino jerarquizamos al plantel docente con reconocimientos formales. No podemos seguir sosteniendo esta Facultad con el porcentaje de, por ejemplo, grados 2 que tenemos.
En 2do. Lugar, el tema del Plan de Estudios y de la estructura: a mi me parece fantástico que nuestro Plan de estudios sea generalista, lo son los planes de estudios modernos en el mundo. No es que uno sale Licenciado en Psicología con una especialidad o un perfil en niños o en adultos o en viejos o en organizaciones. Tiene entonces, que habilitar rápidamente al pasaje de formación de postgrados. En ese sentido yo creo, que nuestro Plan de estudios es muy grande. Cinco años, es decir, no necesitamos toda la carga horaria que tenemos, los elementos más ricos de nuestro plan de estudios es la cantidad de práctica que tenemos. Algo que la gente que lo ve en la AUAPSI, lo ve a nivel internacional, la gente que viene de Brasil, Argentina o Europa.
Nuestro Plan de estudios es fantástico en la práctica. Capaz que yo le hablo a muchos estudiantes de 1ero. y dicen ¿dónde está la práctica? pero realmente tenemos un nivel fantástico en práctica.
Yo creo que 5 años es mucho, creo que en cantidad de horas podemos tener un Plan de Licenciatura de 4 años (4 y medio), con otro componente que me parece importante que incorporemos: la tesis final. Tenemos que jerarquizar un licenciado que culmine con una tesis su formación.
El otro tema es postgrados, entonces los postgrados son básicos, las especializaciones, maestrías y doctorados.
¿Por qué necesitamos postgrados? Básicamente por 3 cosas:
_ porque en los postgrados se asientan las posibilidades de desarrollo de uno de los fines más ricos de una institución universitaria: la investigación.
_ porque los programas nuestros tienen que respaldar y jugarse la ropa por algo muy rico que tenemos nosotros: la extensión.
_ en 3er. lugar porque los postgrados tienen que permitir niveles de actualización.
Lo planteo en este orden: investigación, extensión y actualización.
Porque yo lo adelanto, entre nosotros está bastante marcada la línea de que a la hora de hacer postgrados hagamos primero cursos de especialización.
Hagamos primero cursos de especialización, después hacemos maestrías y luego doctorados. Eso me suena a lo que les decía al comienzo de las políticas.
¿cuándo tendremos maestrías? ¿cuándo participaremos de proyectos diada?
Yo creo que la Facultad tiene que ver con estos 3 niveles al tema postgrados, pero no puede hipotecar, en horas de cursos de especialización, los postgrados y las maestrías.
Ahora ¿qué postgrados tenemos que hacer? Yo no sé, tengo algunos criterios. Nosotros manejamos mucho la idea de que los postgrados tienen que tener en cuenta 2 aspectos que aparecen como dilemáticos pero no por eso dejan de ser importantes:
Uno y sobre todo con el tema de actualización, los postgrados tienen mucho que ver con el mercado profesional. Es decir la gente hace postgrados en función de aquello que les facilite la inserción laboral. Esto implica que es esto de la investigación, que es esto de la filosofía de la ciencia y de los problemas epistemológicos, etc. Yo estoy haciendo este postgrado básicamente “para laburar”, entonces está muy marcado por lo que el mercado paga.
La Facultad forma profesionales y tiene que respaldar a los que egresan y también tienen que apostar a esto. Ahora, la Facultad tiene que articular esto y priorizar otra línea que es la del ensanchamiento del campo profesional. Si esta Facultad no se juega por determinados proyectos, ámbitos, problemas, no existe en el campo profesional. Algunas actividades que la Facultad realiza, el mercado no está dispuesto a pagar nada por ellas, pero la Facultad las tiene que hacer. Algunas se han logrado imponer vinculadas al mercado como el trabajo con viejos, algunas quizá no se impongan todavía o nunca en función del mercado. El trabajo con los sectores más pobres de la sociedad uruguaya, la Facultad lo tiene que hacer. Tiene que ensanchar el campo de inserción de profesionales ¿en qué puede trabajar un psicólogo?, todos esos son criterios que hay que considerar a la hora de los postgrados, qué temáticas.
Sobre el tema: ¿pagos o gratuitos?. Bueno, ayer un estudiante me preguntaba:
“si se viene la ocupación ¿seguimos atendiendo los pacientes en el servicio?.” Aparte de las definiciones, implica un posicionamiento, una visión política, ética, etc.
Yo sigo pensando que el ingreso a la Universidad tiene que ser gratuito. Esta Facultad se sigue jugando por ese proyecto.
La realidad también es que los profesionales universitarios nos aprobamos de un plus de representación e inserción social que básicamente nos beneficiamos nosotros y hay dificultades para que circule en el colectivo social.
Los postgrados creo que no tienen la viabilidad de concretarse si no es que habilitamos la posibilidad de que por lo menos algunos sean pagos.
Primero porque en lo que hace a la inserción profesional, y sobre todo a los de actualización, a los que están vinculados a lo que el mercado está dispuesto a pagar, me parece que ahí, hay que pensar en postgrados pagos. En tanto que podamos desarrollar, sobre todo las líneas de maestría, doctorado, las vinculadas a la investigación, ojalá podamos desarrollar postgrados sin tener que pagar...pero eso resulta impensable si queremos concretar los postgrados pronto.
Termino con esto: mi propuesta es que me parece que tenemos que construir problemas con esto. Yo creo que es necesario que la Facultad genere niveles de reconocimiento mayores entre nosotros.
¿Cómo se financian los postgrados? Bueno, es un tema complicado. Ahora, creo que hay que salir de la base tomando un ejemplo muy concreto de que los postgrados pueden concretarse más allá de la situación presupuestal. No quiero pasar por voluntarista. En estos días, quizás los estudiantes se hayan enterado o no, el Instituto Nacional de Enfermería (Instituto asimilado a Facultad de nuestra Universidad) , quizás la Institución más pobre de esta Universidad pobre, acaba de lanzar una nueva generación de maestrías. Digo, el problema que nosotros tenemos con los postgrados no es solo presupuestal (no digo que ese factor no incida) , el problema que tenemos a nivel del reconocimiento, los problemas que tenemos de poder, vinculados a conflictos muchas veces personales y no construidos como problemas del colectivo.
Después está el tema de que obviamente se necesitan recursos para determinadas cosas. Permanentemente aparece la disposición de diferentes instituciones a colaborar con el tema de postgrados, aún cobrando cifras irrisorias o no cobrando nada. Tenemos que definir, entonces, qué postgrados queremos como primer elemento, gracias.

J.R.N: Bueno, yo voy a hacer un enfoque un poco parcial y distinto, porque creo que Luis dio elementos bastante interesantes. Les voy a leer una frase del libro de Max Weber, dice así:
“cuando oímos clamar en todas partes a favor de la introducción de currículums regulares y exámenes especiales, desde luego el motivo no es una sed de educación repentinamente abrigada, sino el deseo de limitar la oferta para esas posiciones y su monopolización por parte de los titulares de certificados educacionales. Actualmente, el examen o postgrado constituye el medio universal de esta monopolización y por ello los exámenes progresan irresistiblemente puesto que la educación requerida para la adquisición del certificado educacional exige considerables gastos y un período de espera, antes de obtener plena remuneración. Este esfuerzo supone un desplazamiento del talento en favor de la propiedad”
Este es un trabajo hecho por Max Weber por allá, por 1910-1914. como ustedes saben es el más grande sociólogo del SXX, sobretodo en el análisis de lo que son los controles burocráticos de los saberes y la dominación. Abro el tema así porque creo que Max Weber alertaba sobre el tema en 1910 y lo que hoy tenemos es el triunfo de la plagada de papeles y certificados: masters, doctorados, etc. porque es además algo que después Trosky y también algunos otros autores marxistas o neomarxistas como Castoriadis, ellos manifestaban el auge de una generación de una clase, de una especie de dominancia tecnocrática, que cada vez iba contaminando más los aspectos políticos estatales y que eso sería fundamental para los aspectos de la regulación, administración, control social y dominación hegemónica. Ese es el contexto en el cual estamos, en el que la Universidad es un aparato de élite, eso ya lo sabemos y también sabemos que los que estamos acá tenemos el privilegio de estar acá.
La Universidad de la República tiene un carácter totalmente populista y además tiene una intencionalidad democrática y civil de retorno de los saberes a las clases populares y a la sociedad global. Esto no quita que en nuestra Universidad haya enormes tensiones entre las partes altamente tecnocratizadas (y técnicas al servicio de empresas multinacionales) como otras que están mas al servicio de los mas necesitados, esto es dado por el perfil profesionista que adquieren determinados servicios. Me refiero así a Psicología, Asistencia Social, Salud, etc. pero siempre observamos este espíritu del capitalismo mundial integrado. Por otro lado se ha ido asentando que las Universidades por su valor de fuerza de conocimiento y de producción se encuentran bajo la égida de la estructura de postgrados, o sea, que lo que son investigaciones, renovaciones o advenimientos y novedades tecnológicas, etc..devienen fundamentalmente de los postgrados. Hay una frase que dice “una licenciatura se construye de los postgrados”, no se construye desde la licenciatura en si misma, se construye desde la visión de impacto de la investigación. Nosotros lo hicimos al revés y no es porque no tenemos postgrados sino lo que teníamos era una masa crítica de psicólogos que se habían formado, algunos en la época de Humanidades, otros durante la dictadura, otros privadamente, otros en el Plan EUP, Plan Psicología Infantil, etc., esa historia que ustedes ya conocen. Evidentemente que la estructura dictatorial apoyó muy fuerte los desarrollos psicoterapéuticos , o sea que evidentemente la predominancia de determinados sesgos de la hegemonía como el psicoanálisis, otros más deviene de las prácticas clínicas privadas. Acá es cuando lo público y lo privado se mezclan dentro del tema ámbito, que es un tema bastante complejo. A mi entender hay demasiados intereses en juego y a veces se inhibieron las posibilidades de desarrollo de los postgrados y la Facultad necesitaba del advenimiento de una masa crítica de producción para después, posteriormente generarlos. Si bien está contemplado en el Plan, inevitablemente me parece que es necesario que esta masa crítica se concentre para poder producir un efecto de investigación mayor. Ese es un aspecto, pero por otro lado también existen una serie de intereses que capitalizaba la formación de psicólogos una vez egresados, o sea, un aparato de captura a nivel privado, que formalizaban determinadas formaciones en determinados campos esencialmente en la psicoterapia. Esto sufrió un giro hace unos años a partir de la posible reglamentación de la psicoterapia, que la Facultad lo frenó oportunamente con buenos argumentos, la frenada vino por el lado de que “hasta que no hay una reglamentación en cuanto el ejercicio del psicólogo, no tiene ningún sentido empezar a reglamentar las psicoterapias”. Si bien este emergente obedece fundamentalmente a ámbitos privados, de captura de determinadas organizaciones de la Psicología (Psicoanálisis y demás) que intentaban armar un sistema de asociacionismo contra la Facultad y armar los postgrados desde dichas instituciones. Era muy complejo el tema en el campo psicoterapéutico, como no hay una reglamentación, las legitimidades son múltiples, pueden venir desde una actitud de trabajo público (por ejemplo en un Hospital Público) o la legitimidad deviene de que una Institución en determinado medio tiene un prestigio de trabajo por su impacto social dentro de determinados niveles y aún dentro de la Universidad. Bueno, el hecho de que uno hubiera pasado por esas organizaciones y se hubiera formado en ellas, daba como un aval, aunque no legal, era legitimador. Y este es un aspecto del problema de los postgrados.
Lo que hacen los postgrados a mi entender, como dice Max Weber, es reordenar el terreno y lo reordenan bastante bien.
Mi experiencia en el exterior con los postgrados fue muy disímil. En primer lugar, mi padre estaba en una de las Universidades “top 10” del mundo, y él era el jefe de postgrados en ella. Me explicó y entendí mas o menos el sistema de producción, por ejemplo: ellos tienen un nivel de lo que son masters, que están más o menos escolarizado. ¿Qué quiere decir esto? Que un master se construye a partir de mas de 400 horas, tiene una escolarización obligatoria de aproximadamente 200 horas, y después son muy rigurosos los sistemas de control de la producción, es en lo que se hace hincapié.
Tienen 3 sistemas de control hasta que se da la tesis y lectura final con una comisión que lo pelotea de arriba para abajo. Mientras que los doctorados los dejan prácticamente libres, o sea, no le dan escolaridad al doctorado. Parten del presupuesto básico de que el que propugna un Doctorado, lo que hace es presentar un proyecto, y lo que se le enjuicia es el proyecto, su viabilidad. A veces existen proyectos que exigen un trabajo muy fuerte a terreno y otros que son “bibliotecología”. Entonces el doctorado es muy amplio y muy severo en los sistemas de control de producción. Hay plazos que hay que fijar claramente en un lapso de aproximadamente 2 años y la persona que fue aceptada con su proyecto tiene que ir presentando avances permanentemente a la Comisión (no al tutor, ojo!). la comisión hace una serie de observaciones de diferentes referencias. En ese sentido a mí me pareció interesante ese modelo, por ser de plena producción escritural, yo creo que las especializaciones y actualizaciones son menores en su escala de tiempo (1 año), son altamente escolarizadas y a mi entender están referidas al campo de lo profesional, más ligadas al terreno de lo profesional. Creo que es necesario que nosotros podamos como Facultad, instrumentar esta serie de postgrados porque me parece que las trancaderas han devenido en lo que más o menos mencionaba Luis, porque hay un problema de reconocimiento interno mutuo entre nosotros. Un aspecto es entonces empezar a reconocernos por nuestros saberes y creo que es uno de los caminos posibles para la conformación de los postgrados y que además liberaría de pronto, cierta potencialidad creativa que todos tenemos pero que como que estamos encuadrados, entonces quedamos sujetos a presentar nuestros trabajitos en algún Congreso, en algún Encuentro, etc.
Por otro lado, el tema de las psicoterapias, se traía a colación muchos temas de otros países, yo estuve en España, en México, en donde los sistemas de reglamentación del ejercicio profesional de la psicoterapia está restringido a 3 profesiones: Psiquiatría (con alguna especialización en psicoterapia), Psicología (con postgrado en Psicología Clínica) y Asistente Social ( con postgrado en psicoterapia).
En EEUU, México o España, hay sistemas donde si uno es Licenciado en una carrera podés hacer una maestría de otra que sea compatible, eso es muy común dentro de sus perfiles profesionales. Pienso personalmente, que en relación al tema psicoterapia la Facultad puso un parate muy en serio en el asunto, porque no existe un postgrado reglamentado todavía a nivel global, con lo cual pensamos que el título de Licenciado que otorga la Facultad es habilitante para el ejercicio. Si bien sabemos que de pronto el Curso de Técnicas Psicoterapéuticas (del que estoy encargado) no convalida una formación para psicoterapia, sin embargo el conjunto de prácticas que se desarrollan por los Servicios y otras Áreas, conlleva a una masa crítica de horas de ejercicio del trabajo psicoterapéutico bastante considerable, que además es un trabajo monitoreado, supervisado, controlado por docentes, lo cual garantiza un posicionamiento ético y un caudal de saberes que por lo menos garantizaría el proceso adecuado en la formación.
Con respecto a la pregunta ¿gratuitos o pagos? Sí, los postgrados deben ser pagos. Yo creo que es más que suficiente que la Facultad otorgue gratuitamente el título de Licenciatura en Psicología, el que después quiera avanzar más, eso tiene que ser pago, como una forma de retribución a la Facultad ya que a la Facultad le cuesta mucho dinero formar un Licenciado.
El otro día leía una tabla, creo que un médico anda en el orden de los
U$S 45.000, entonces cuando se le entrega el título se le está entregando
U$S 45.000 de horas de trabajo, a pesar que no estoy hablando del sacrificio que hizo ese estudiante, sino que estoy hablando del esfuerzo que hace nuestra Universidad. Personalmente creo que los postgrados deberían ser pagos como una manera de saneamiento. Los postgrados no son incompatibles, el tema de si se hacen por ámbitos, por corrientes, más bien creo que tienen que ser temáticas globales, en relación a las maestrías, tienen que ser totalmente libres (es decir pueden ser por ámbitos, etc..) y me parece que las Especializaciones tienen que ser mucho más estrictas (por corrientes, etc). Aún dentro de los Doctorados uno puede elegir una temática específica con una línea teórica que pueden ser perfectamente combinables, por ejemplo: Psicoanálisis aplicado a la comunidad. Si ya René Vaez se tomo el tupé de hablar de Instituciones hasta el hartazgo siendo psicoanalista, por qué no un psicoanalista se puede ocupar de una comunidad y decir lo que opina ¿no?. Después veremos su producción, la cuestionaremos, evaluaremos, etc, pero es un buen trabajo, o sea que esta combinatoria se puede resolver perfectamente.
Por último ¿qué paso con los postgrados en el Plan IPUR? En el Plan IPUR, hay desde sus estatutos, una frase enigmática, paradigmática, paradojal, como quieran llamarla, que dice que los postgrados tienen su inserción en los Servicios. Eso es una maravilla, o sea, se tiene una inserción a partir de los Servicios, con lo cual se generó una cortina de humo, un efecto lupa dijera Loureau. Creo que es una frase feliz y a su vez tiene sus bemoles y sus debilidades; no todos los postgrados pueden depender de los servicios, esto tiene más bien un enfoque profesionalista y extensivista, pero a veces es necesario abrir el campo para una investigación más pura, una investigación que pretenda agarrar cosas que si la Universidad no las agarra, no las agarra nadie. Entonces, este es el punto más básico para el cual esta la Universidad.
Y para terminar a mi me parece que en un lapso más cercano, yo creo que es ya de relativa urgencia armar esto, con cuidado, el proyecto que se ha presentado, que yo leí por lo menos, es producto de los talleres y me parece muy interesante y muy bueno, muy bien trabajado, habría que diseñar la política para ver por donde se empieza... pero me parece que es importante por que en el ámbito de lo privado, la UCUDAL por ejemplo, están jugando muy fuerte, están capturando todo este tema, y a mi me parece que si la Universidad no quiere perder presencia en este campo, tiene que producir la apertura de los postgrados.

V.G: Bueno, primero quiero agradecer la organización de este espacio, que más allá de la presencia nuestra, creo que es importante poder abrir lugares donde discutir el tema postgrados, que es algo que se viene conversando desde ya casi 2 años en Facultad, pero que necesita sin duda un empujón para poder ponerlo en práctica lo antes posible. Creo que para pensar es necesario definir un poco el escenario en el que estamos pensando para trabajar. Y con esto voy a una de las primeras preguntas que se me formulaba sobre la necesidad de los postgrados. El escenario en el que estamos moviéndonos tiene una enorme velocidad en cuanto a los cambios del conocimiento, esto todo el mundo lo dice, es una de las pocas cosas consensuales que existen hoy en día en el mundo académico. Por otro lado hay una fuerte tendencia a la globalización, esto quiere decir que las fronteras son cada vez más relativas, o sea que los fenómenos que ocurren a nivel internacional cada vez nos llegan más de primera mano, menos filtrados, menos digeridos y dentro de los fenómenos de globalización tenemos por una lado todo el tema de la estandarización de los sistemas de acreditación de las carreras. Ya en Argentina existe un Consejo que acredita las carreras ya sea de Universidades privadas o públicas, está por encima de ellas, y uno de los requisitos de acreditación es que en la carrera haya un porcentaje del cuerpo docente con formación de postgrado, maestría y doctorados. Esto inclusive está puesto a nivel de los protocolos del MERCOSUR, o sea que de alguna manera Uruguay suscribe esto. Por otro lado es que también a nivel del MERCOSUR comienza a haber una apertura de fronteras en cuanto a la circulación de profesionales (argentinos, brasileños, chilenos, paraguayos), y esto implica una competencia dura con países donde ya hay estructura d e postgrados hace años. Por otro lado está el hecho de que tenemos que estimular la producción de conocimientos nacional. Esto tiene que ver con que si no producimos nuestros propios conocimientos lo único que nos queda es comprar conocimientos producidos por otros. Esto tiene que ver con los instrumentos, con las teorías, con las tecnologías en todos los campos, ya acá hay un aspecto ideológico, en todo esto de la incorporación de los postgrados a la vida universitaria, que creo que no hay que soslayarlo. Tiene que ver con que estos estándar de acreditación de las carreras, cuando se imponen países donde los doctorados no están instituidos, lo que estamos imponiendo es un tutelaje sobre el sistema educativo de personas formadas en el exterior, o sea en la metrópoli. Este caso es muy claro en Argentina, donde a partir de la aprobación de esta ley, en que los doctorados son el futuro de los cuerpos docentes, se generó una concentración muy fuerte de poder en un puñado de doctores que tienen una mentalidad europea, y que son los que tienen que tutorear las tesis de los futuros doctores argentinos. Esto no es una cuestión atemorizante, pero si es un riego puntual, y creo que esto nos obliga a pensar en la necesidad de producir nuestros propios postgrados académicos, mientras las ordenanzas y los criterios de acreditación del país nos lo permitan, creo que este es un elemento fundamental a tener en cuenta.
Si ustedes ven la ordenanza que se está manejando a nivel Central sobre postgrados, la cual fue aprobada el 19 de setiembre de este año, tiene como exigencia para la supervisión de tesis de doctorados y maestrías, el título de magister o doctor, o en su defecto la posibilidad de que sea un investigador de reconocida producción en actividad y grado de docencia universitaria 4 o 5. Esto abre un espacio para poder implementar nuestros postgrados con un menor nivel de dependencia del exterior, y es una oportunidad que tenemos que aprovecharla mientras esté abierta, porque en la medida que las carreras de mayor peso político en la Universidad comiencen a acumular su masa crítica de doctores y magisters, va a ser muy difícil sostener una ordenanza general con estas características. En esta carrera, por el conocimiento, por la profesionalización docente, por la superación de los techos de la Licenciatura, por formar postgrados académicos que tengan que ver con la producción original, e incluso formar postgrados profesionales; las Universidades públicas de la región en general, corren como si fuera una especie de carrera de embolsados; porque es muy difícil seguir esta carrera, con las dotaciones presupuestales que tenemos. Un presupuesto que desde hace 5 períodos, con el presupuesto escaso de esta Facultad, que son 300 dólares por estudiante al año, o sea unos $300 pesos al mes, más o menos, y con eso tendremos que estar siguiendo esa carrera, de actualización permanente del conocimiento, y eso sin renunciar a algunos principios como por ejemplo el ingreso irrestricto y la gratuidad de la enseñanza.
Hay otro punto a tener en cuenta en este escenario y son las crecientes demandas que aparecen hacia la Psicología. La sociedad en general está viviendo un resurgimiento de los valores subjetivos en muchas esferas de la actividad humana. Esto genera demandas que vienen desde el mundo del trabajo, desde el mundo de la empresa, desde las instituciones educativas, desde niveles de actividad que antes eran muy alejados de la Psicología, como puede ser por ejemplo el ordenamiento del tránsito o el problema de la seguridad laboral en las empresas, o el problema en el ámbito jurídico, de las normativas del derecho, etc. Pero el problema es que estas demandas, no vienen con un sello hacia la Psicología, sino que vienen, y para que la Psicología pueda hacerse cargo de ello, debe haber psicólogos empapados en estos temas y con una credibilidad profesional importante. Las fronteras profesionales, al igual que las nacionales con cada vez más laxas. Este movimiento de revalorización de los factores subjetivos, no necesariamente va acompañado de un reconocimiento de la Psicología como profesión idónea para abordarlo, sino que muchas veces son otras profesiones de mejor prestigio social, o aún profesiones nuevas que surgen para capturar esas demandas y para introducirse en esos campos.
O sea que un elemento a favor de los postgrados es la necesidad de ampliar el campo profesional, de formar profesionales capacitados para incursionar en esos nuevos terrenos, en esos nuevos ámbitos y que están respaldados, certificados por la UDELAR. Más allá de que existan psicólogos que hoy puedan hacer algo en ese terreno, o alguien que tuvo experiencia, o alguien que leyó, por ejemplo, por que su padre tenía una empresa constructora, entonces se mete en el tema seguridad en la construcción, que son los mecanismos por los cuales se ha incursionado hasta ahora en ese terreno. Necesitamos entonces, que estos 250 egresados que están saliendo por año de la Facultad puedan tener la oportunidad de formarse y certificar su formación en esos campos emergentes de actividad profesional para ensanchar el campo. Además de los campos emergentes, hay que considerar lo que ya tenemos. Joaquín se refirió muy expresamente al terreno de la psicoterapia donde también hay que consolidar lo que tenemos. O sea a mi entender necesitamos poner en marcha postgrados profesionales, o sea, especializaciones que amplíen el campo profesional para cuidar lo que tenemos y para ampliar e incursionar en campos emergentes. Necesitamos poner en marcha postgrados académicos que permitan investigación, producción de conocimiento y que permitan además una independencia a nivel de la Universidad y a nivel nacional, la posibilidad también de llegar a establecer los estándares internacionales de las carreras y tener contraparte para los doctorados y las maestrías de los países del MERCOSUR. ¿Cómo son estas especializaciones? ¿Cómo se definen las fronteras? Este es un tema muy complejo. Yo creo que las especializaciones se deberían definir por áreas de problemas. Me parece, y digo me parece porque no es una posición fuerte, habría que procesarla, pero creo que hacerlas por corrientes implicaría continuar profundizando algo que le hizo mucho daño a nuestra profesión y es, ver la realidad a través de los sistemas teóricos y tomarlos a éstos como sistemas de afiliación, como sistemas de pertenencia y no como instrumentos para resolver los problemas de la realidad. Yo sería partidario de hacerlas por área de problematicidad, buscando una cierta convergencia teórica, un sistema de referencias teóricas donde de pronto podrían haber instancias donde pudieran verse distintas orientaciones teóricas donde el cursante pudiera hacer sus opciones. Pero trataría de definir áreas de problema, independientemente de la corriente con la cual se aborden. Claro, que por supuesto hay que definir paradigmas, pro los paradigmas son mas amplios que las corrientes y pueden perfectamente ayudar a trabajar entre distintas posiciones teóricas.
En el caso de las maestrías, creo que hay que manejar grandes áreas, que no pueden tener fragmentos tan pequeños de la realidad como los que se manejan en otros países, donde las maestrías tienen muchas veces una orientación profesional; en este caso yo pensaba en maestrías fundamentalmente académicas y esto tiene mas que ver con una concepción epistemológica también. Si las maestrías son para generar conocimientos y si uno considera que el conocimiento se genera por acumulación y que no puede prever sobre que va a investigar, como que el problema es previo a la investigación, uno puede dividir parcelas muy chicas, es decir, esta persona va a investigar en los próximos 40 años, sobre, por ejemplo: anorexia nerviosa. Pero si uno piensa que el conocimiento es algo mucho más dinámico, que los problemas se reformulan en el curso mismo de los procesos de investigación, que las fronteras de conocimientos se relativizan a través de los propios procesos de conocimiento, no tenemos más remedio que definir maestrías en grandes ámbitos, donde el magister pueda, de alguna manera tener una fluctuación a lo largo de la evolución de sus investigaciones, donde pueda concentrarse en diferentes áreas e incluso reformular los problemas sobre los cuales trabaja.
El doctorados es otra cosa. Es algo que tiende a ser un reconocimiento académico por encima de las subdisciplinas. Incluso en algunos casos, por encima de los títulos de grado. Yo creo que el doctorado debería se en nuestro caso, un doctorado en Psicología de acceso libre, de acceso múltiple a todas las disciplinas afines y que debe tener unas baja estructuración curricular. Ahora, no olvidemos cuando discutimos esto, que nosotros ya tenemos una ordenanza votada por el Directivo Central, donde ya está establecido, y no son los puntos de mayor discusión, lo que es una especialización, que carga horaria tiene, son 60 créditos a 15 horas cada crédito, o sea son 900 horas; ya está definido lo que es una maestría y ya está definido lo que el doctorado es una postmaestría, o de lo contrario, tiene que tener una carga horaria y un requisito curricular similar al de una maestría y esto ya nos condiciona. Nosotros, en este momento estaríamos en condiciones de poner en marcha maestrías y especializaciones. Los doctorados deberíamos pensar en la posibilidad de cursarlos paralelamente a las maestrías o de lo contrario serían solamente para los que tienen maestrías o para quienes egresen de ellas.
Un punto que me parece importantísimo: ¿pagos o gratuitos?.
Gratuitos no hay, la enseñanza gratuita no existe, alguien la tiene que pagar. Yo creo que este es un falso dilema, acá la pregunta es quién la paga. Y al momento de preguntarnos eso, creo que sería deseable que se pagaran del presupuesto de la Nación, del universitario. Pero, como dice un autor argentino que yo cito muy a menudo, que se llama Gasalla: ¿Cual es la real realidad?. La real realidad es que quienes egresan en este momento en general, ¿qué hacen?. Buscar formación. No tiene ninguna oferta de postgrado de la Psicología universitaria más allá de los cursos para graduados, que son otra cosa, pero si tienen una oferta de la Universidad Católica 8que no es buena). Pero es una oferta reconocida, institucionalizada. Un dato, la Universidad Católica tiene solo 300 estudiantes de grado, nosotros tenemos cerca de 3800 estudiantes activos, o sea 10 veces más, y ellos tienen 100 estudiantes de postgrado y carreras de postgrado con 2 o 3 años de antigüedad. La otra posibilidad para los egresados es ir a instituciones que no ofrecen postgrados, aunque algunas de ellas están haciendo algún esfuerzo para institucionalizarlos, para así ofrecer formaciones; formaciones que han sido las tradicionales: en el campo clínico por ejemplo. No voy a decir que no son buenas, algunas son buenas, otras no tanto, pero son referidas, en un 99% al trabajo clínico, de consultorio. Y todo esto es pago, o sea la gente que egresa de Psicología va a pagar esos lugares, con lo cual, compra cosas que no siempre se acoplan a sus necesidades y a las posibilidades laborales reales, o sea a las demandas laborales; y por otra parte no siempre tienen un nivel académico deseable y que además fortalecen instituciones y espacios que directa o indirectamente están cercenando, discriminando del espacio de la UDELAR.
¿Con esto que quiero decir? Quiero reafirmar que los postgrados son necesarios, imprescindibles diría yo, que la UDELAR y la Facultad de Psicología tienen la obligación de ofrecer formación es postgrados y si el dilema es si son gratuitos o pagos, o no son, yo creo que primero tienen que ser, después vemos como los financiamos.
La propuesta que nosotros hicimos en su momento y está siendo discutida por el claustro en este momento es, de cobrar teniendo en cuenta la situación de excepción presupuestal que atraviesa la Universidad, es cobrar una variada gama de especializaciones que apunten fundamentalmente a ampliar el campo profesional, a campos emergentes. Con ese dinero, establecer un porcentaje de recargos sobre los costos reales que permitan financiar o al menos subvencionar un puñado de maestrías de alto interés académico. ¿Por qué esta diferencia? Porque los postgrados profesionales van a ser cursados por gente que ya esté inserta laboralmente y ya muchas veces está pagando en algún lado, y con mucho gusto vendrían a la Universidad. En cambio los postgrados académicos son fundamentalmente formación de recursos humanos para la tarea académica. Y va a tener un alto porcentaje de docentes cursando , con salarios que no vamos a hablar de ellos , que la Universidad y la Facultad deben estimular la formación de postgrados académicos por esto esta posibilidad que los postgrados académicos sean subvencionados y si es posible gratuitos. Acá hay un problema , y es que si son subvencionados o gratuitos necesariamente van ser limitados. Y vamos a tener que establecer criterios colectivos de selección. Por que seleccionar a curriculum puro , implicaría una gerontocracia , o sea entraría solo gente con una importante trayectoria , por eso habría que establecer otros criterios que permitieran que también entrara otra gente. Si los postgrados son pagos posiblemente la franja de postgrados va a ser muy amplia. Mientras haya quienes los puedan cursar y se autofinancien, podemos hacer una buena oferta.
Alguna cosita más: Entre las demandas emergentes, porque acá hay todo un problema, en este momento hay 3.500 psicólogos aproximadamente en la plaza laboral, están egresando 250 por año o quizás más , 300 o 350 por año y por el actual sistema de regulación de la educación y de la salud en nuestro país, el subempleo es muy grande ( sub y desempleo ) entonces tenemos que atender a impulsar postgrados en áreas donde haya necesidad social y por lo tanto se les otorgue el trabajo. No estoy hablando de un mercado puro sino también teniendo en cuenta necesidades sociales y entre las cosas que se necesitan , se necesita un psicólogo capaz de intervenir en las problemáticas que hoy estallan en las instituciones educativas, un perfil capaz de resolver, de intervenir en lo que hoy pasan en las instituciones educativas, que no es psicología educativa porque lo que sucede no es un problema de aprendizaje, son problemas de relacionamiento, de familia, son problemas de violencia, de drogas, de impotencia del sistema educativo para dar cuenta de los problemas que están ante sus ojos y no pueden manejarlos . Se necesita un psicólogo capaz de intervenir en el área de la criminología, donde se esta discutiendo una transformación en el código penal con figuras como la mediación por ejemplo, donde los psicólogos deben están muy bien formados para intervenir en este tipos de cosas y que si no nos apuramos nos van a ganar de mano Porque ya se están formando abogados, asistentes sociales, se esta pensando en una profesión independiente de “mediador“. Toda la problemática de las organizaciones laborales en pequeña escala, las pequeñas y medianas empresas que generan problemáticas de relación , de sufrimiento y de dinámicas de constelaciones muy singulares, ese es un perfil que tampoco existe.
A nivel de la clínica tal vez sea el sector que más se ha formado, pero tampoco hay psicólogos formados para trabajar en instituciones que asistan colectivamente, no quiero decir asistencia clínica preventiva porque parecería que es una mutualista, pero todo tipo de institución que atienda grandes poblaciones no es lo mismo que la clínica de consultorio.
¿Cuál es la propuesta concreta que manejamos en este momento ? Yo creo que en aras de lo que planteaba Leopold que tiene que ser para el 2001, lo que planteaba Joaquín para el 2002 yo creo que antes de fin de año lo que hay que hacer es aprobar un reglamento general que este en el marco de la ordenanza de carreras de postgrados de la Universidad de la República, que es poca cosa lo que hay que hacer para hacer un reglamento, prácticamente esta todo definido. Que el reglamento defina los grandes lineamientos y la estructura curricular de las especializaciones, de las maestrías y los requisitos para el doctorado. Ese es el primer paso. Mientras no tengamos un proyecto, un reglamento, de esas características aprobado no podemos plantearnos nunca hacer nada. El segundo paso es implementarlos. Implementar un abanico de especializaciones y un puñado de maestrías. Hay que ver que hacemos con el doctorado, Se puede cursar paralelamente a la maestría , se puede cursar por maestrías o se pueden buscar formas de acreditación de equivalencias a maestrías, hay que estudiarlo hay que verlo. Pero creo que el reglamento tiene que aprobarse lo antes posible más allá que demoremos en doctorar gente y no podemos dormirnos en esto porque cada vez la Universidad va a ser más exigente en la reglamentación de implementación de postgrados.
Bueno , creo que hay muchas más cosas pero ya estamos en el tiempo, así que simplemente para cerrar insisto en que hoy por hoy la realización de postgrados es un desafío ineludible para Facultad. Creo que el motivo por el cual los postgrados no están ya en marcha son de muchos tipos pero yo me atrevería a decir con el riesgo de caer en el ridículo , hay incluso una motivación que yo tildaría de edípica ¿Por qué ? Porque acá hay un peso muy grande de la formación privada y cada vez que se habla de una especialización o una maestría conciente o inconcientemente estamos comparando lo que puede ser el postgrado universitario de 600 horas , de 300 horas con lo que son largos procesos de formación psicoanalítica de años de supervisión , etc, entonces no nos animamos a romper con eso y a expedir un título de especialista en clínica rompiendo con esa tradición , y eso esta pesando mucho , en una cosa casi transgeneracional diría yo. Lo digo porque yo soy de la generación que decía que no se podía estudiar clínica en la Universidad y que para hacer chantadas mas vale recurrir a lo privado. Eso ya hoy no suena tanto pero en las cabezas sigue circulando y también en algunas instituciones que nos representan fundamentalmente en las instituciones de egresados es un discurso fuerte y creo que en eso tenemos que poder romper el molde y encarar una posición radical de psicólogo universitario. ( Aplausos )

Enrico – Ahora los invitamos a abrir la discusión , tenemos hasta 22.30 , queremos que se formulen preguntas o pensamientos libres con respecto a los que han leído o a lo que quieren saber.

Pregunta - ¿ De quién depende que de aquí a fin de año se reglamenten los postgrados?

Giorgi -_Y... básicamente de nosotros. El Claustro tiene una propuesta elaborada por la Comisión de postgrados del propio claustro, que resuelve bastante llevaderamente una serie de problemas y está enfatizando las especializaciones pero en forma de ordenanza general, nosotros tenemos que aprobar un Reglamento General. A partir de ahí el propio consejo puede habilitar a todas las especializaciones que quiera, siempre y cuando cumplan con ese reglamento general. Las maestrías, si bien tienen que cumplir también con ese reglamento general, tienen que ser aprobadas de a una. En cada maestría se van a volver a discutir una serie de aspectos. Todo esto depende fundamentalmente de una voluntad política y de una posibilidad de funcionar no quedándonos entrampados en determinadas contradicciones. Por ejemplo, el tema del cobro, del no cobro, que si es tan difícil de resolver ese punto, yo le decía recién al presidente del Claustro que si es tan difícil hagamos un artículo ambiguo que nos permita resolverlo más adelante y sigamos trabajando con el resto. Tengamos en cuenta que el año 2001 es un año de apertura presupuestal quinquenal, o sea, es fundamental que tengamos una propuesta de postgrados, sino no vamos a poder pelear un presupuesto para eso. En este momento estamos coordinando maestrías con otras instituciones (drogodependencia) pero no tenemos reglamento de postgrados, eso dificulta a la hora de coordinar con otras instituciones. Eso no nos permite tampoco convocar otras instituciones y son docentes de acá los que van entonces a ellas a dictar cursos de especializaciones. Es hora de superar nuestro temor al crecimiento. Reconocer que tenemos que hacer nuestros propios modelos, como hizo enfermería que está haciendo maestrías.

Intervención: Acerca del cobro o no de los postgrados para ser viables los mismos.

Víctor Giorgi: dentro de un Área de Salud, Medicina tiene especialidades, tiene 3 o 4 de Administración de Hospitales, tiene algunas en el Área de la Biología Molecular, el INDE tiene 3 o 4 maestrías, Psicología no tiene, Química tiene un Doctorado que viene funcionando hace muchos años, pero no tiene postgrados estructurados. Ciencias Sociales tiene diplomas que son equivalentes a las especializaciones de carreras no profesionales los cuales son pagos y tiene alguna maestría en Ciencias Políticas y Desarrollo.
La enorme cantidad de postgrados en realidad la tiene Medicina. Tiene un nivel de estructuración bastante práctico. Las tecnologías tienen muchas maestrías y muchas cursadas en el exterior. Nosotros también tenemos maestrías cursadas en el exterior, tenemos una generación de docentes, alrededor de 10, que tienen maestrías hechas.

Intervención: se realiza una pregunta relacionada a saber de qué cosas depende lo dicho anteriormente.

V.G.: Nosotros tenemos un Reglamento que permite, es bastante claro en ese sentido, que gente con trayectoria en publicaciones, experiencia en investigación, por lo general docentes Grados IV y V, cumplan funciones como para hacerse cargo de un postgrado.

Intervención: en el caso supuesto que fueran pagos ¿la Facultad tiene la suficiente autonomía como para ver a dónde van los ingresos?

V.G.: Si se autoriza a que sean pagos, cosa que todavía esta en discusión a nivel de la Universidad, de todas maneras creo que esa discusión no va a durar mucho. La realidad de nuestros servicios es bastante generalizada, más allá de las declaraciones que acompañen la resolución, algún nivel de autorización de cobro va a haber. Estoy casi seguro, y el dinero que ingrese lo administrará la Facultad de Psicología, lo cual nos da mucha autonomía en cuanto a la política.
En algún momento se planteó la posibilidad de hacer postgrados por convenios, el problema de esto es que, pactados, acordados con Empresas Públicas, por ejemplo: la Universidad Católica tiene un convenio con el INAME de “Políticas sociales en la infancia”. Lo bueno acá, es que UNICEF en algún momento estuvo interesado en financiar algo de esas características, pero en esos casos uno puede hacer aquellos postgrados que ya están, con esto quiero decir que la libertad de decisión, de poder privilegiar áreas de diversos intereses para la psicología, se reduce mucho. Yo no digo que no haya que hacerlos, se pueden hacer, pero como única salida posible de los postgrados es muy reducida.
Yo creo que en este momento, el cobro de las especializaciones es la salida más digna en esta encrucijada que estamos.

Intervención: ¿en la Facultad de Medicina pagan?

V.G.: No, en la Facultad de Medicina los postgrados, las especializaciones, no se pagan. El Consejo resolvió que no las iban a cobrar. La fundamentación es que las mismas están incluidas dentro de la formación básica del médico, o sea que la medicina ya exige la especialización casi como requisito de ejercicio, pero además a esto se suma que es una Facultad que tiene plata.
Medicina tiene un presupuesto histórico a la interna de la Universidad que les permite tenerlos sin cobrarlos.

Luis Leopold: Lo que quería agregar es con relación a lo que dijiste antes. Se han hablado mucho de estas oleadas migratorias del Uruguay, yo creo que la UDELAR, si una cosa aporta, a la perspectiva del proyecto de vida o de sujeción a una localidad, es a través del libre ingreso, ya que se da la oportunidad a gente de 18- 20 años, o más, de quedarse en determinado lugar. Yo creo que a esta categorización que propuso el Decano, de perfiles de psicólogos que necesitamos para distintas problemáticas, hay un perfil que yo agregaría, que es el tema de una comunidad de millones de personas en el mundo, donde los uruguayos participamos de eso, en migración permanente.
Migraciones que afectan a 2 o 3 generaciones de familias, yo creo que se ha hablado mucho de los miles de uruguayos que parece que tramitan el pasaporte, pero el tema no es solamente los que se han ido, sino todos los que lo piensan como una alternativa. Que la cruda realidad, no sé si conservadora, es que en los aspectos laborales, en la mayoría de los casos “el mundo sigue siendo ancho y ajeno”. Y uno muchas veces se encuentra con gente que no encuentra una mejor inserción laboral, que tampoco cuenta con determinados ligazones a determinadas localías, a determinadas situaciones. Claro que hay gente, pos suerte, que se va para Turquía, para Canadá, para Francia y al cabo de los años dice “estoy bien”, “estoy mejor”, pero la realidad que en el contexto de migraciones mundiales que hay hoy por hoy, no sucede, entonces me parece que los postgrados son como un cable a tierra en el contexto nacional.

Intervención: Sí, además tenés una posibilidad más de desempeño profesional.

L.L.: Sí, pero me parece que no sólo hay que pensar en el empleo.

Intervención: Yo quería preguntar, a partir de la realidad de nuestra Facultad a nivel político: ¿Cómo se está jugando esto a nivel del Claustro de Facultad y en general de la Universidad?. Si bien sabemos que esto se va a llevar adelante por medio de una Ordenanza, me gustaría saber por lo menos qué opinan los compañeros que están en la mesa. ¿Cuál es el momento de la Universidad?, Porqué podemos decir que es urgente, que los postgrados tiene que salir para este año o para el año que viene, pero entonces ¿cuáles son los referentes internos?.

Enrrico Irrazabal: Víctor acá está hojeando el informe de la Comisión, versión 3. Dicho informe es una producción del Claustro que tiene 2 años de trabajo intenso, el mismo tiene que ver con los talleres que se hicieron.
Ahora, hay una paradoja a todo esto que me parece que muestra algo de la situación: en el último Claustro, el orden docente dijo que no tenían posición cuando en el Consejo los docentes plantearon la posición docente. Posición discutida en diferentes oportunidades pero la más cercana en tiempo, fueron los talleres que se realizaron y también hubieron varias asambleas. Pero ¿qué quiero plantear con esto? Que algo sucede entre nosotros ¿no?, En que somos pocos, nos conocemos y estamos en distintas inserciones trabajando pero sucede algo entre ADUR, CLAUSTRO y CONSEJO donde claro que se discute, pero me parece que esto muestra algo de la situación.
Yo creo que el tema del Claustro, lo han planteado los compañeros, es complejo, no solo para la Psicología. Víctor traía una versión edipiana, pero yo creo que de otra manera también lo traía Luis. Joaquín trajo el tema de la jerarquización y la legitimación entre nosotros, de nuestras prácticas, de nuestros saberes, yo creo que por ahí es parte del trancazo. En esta Comisión participan todos los órdenes, lo bueno que veo es que si me dicen: esto se aprueba, hay una normativa, antes de fin de año, en el 2001 o en el 2002, yo aplaudo, porque en períodos históricos es muy corto con relación a nuestra historia, pero me parece que tenemos muchas más cosas para decir y no las hemos dicho todavía. Es más yo estaba pensando, que de todos los documentos que he leído sobre el tema postgrados, una de las cosas más ricas fue esta mesa.
Ahora cuando estaba sacando nota, vemos que hay elementos que no están contemplados en los documentos y seguramente tengamos que hacer una edición de esto o algo para dárselo al Consejo. Yo creo que por ahí tendríamos un aspecto en torno a nosotros, los docentes.
En torno a los estudiantes, lo que a mí me llamaba más la atención es que los estudiantes avanzaban en la formación, que históricamente en temáticas de este estilo son los que tienen la posta, que sí tenemos compañeros avanzados en la carrera y en esta Comisión trabajando hace mucho tiempo, pero no sé ustedes como lo ven, yo los veo muy solitarios, dominando mucha información pero que hay ciertos costos en la circulación, no porque alguien la guarde.
Egresados, no sé.

V. G.: Yo quisiera, un poco apoyando lo que decía Enrrico, leer algunas partes que señale en este informe. Este documento que es el Informe de la Comisión de postgrados, versión 3, tuvo la primera versión en setiembre de 1999, es posterior a los talleres, básicamente ya está por tener cuerpo el documento, una versión 2 de diciembre de 1999 y una versión 3 de febrero del 2000.
Las últimas 2 versiones obedecen a pequeñas modificaciones que se hicieron en función de la discusión por los órdenes. Recuerdo que la última por ejemplo, la de febrero de 2000 tuvo que ver con una Asamblea de Coordinadora en la cual se planteo el cuestionamiento acerca de que no se dieron “competencias notorias” en las especializaciones, lo cual fue resuelto a través de la propia ordenanza central, entonces se resolvió por ahí. Como producción de todos, llegamos a un momento donde prácticamente los 3 órdenes estaban de acuerdo pero eso no se expresó en la votación del Claustro. ¿Por qué? Bueno, ahí habría que hacer todo un análisis de lo que pasa ahí como fenómeno colectivo o sea esto que señala Enrrico, de que el orden docente no tenía posición y por otro lado los estudiantes avanzados están muy preocupados por el tema postgrados. Pero en el Claustro se pusieron otros temas por delante, como por ejemplo reestructura, plan de estudios, etc., entonces, de hecho se dilató la discusión. En este informe, que es un documento bastante extenso, se plantea incluso la propia estructura curricular, base de las mismas especializaciones. Plantea por ejemplo: (Lee)
“ Seminario básico, estructurado en módulos de duración de 3 semestres con una carga horaria total de no menos 500 horas. Paralelamente participar de realizar la práctica de campo 9 meses, con carga horaria no menor a las 300 horas. Se desarrollarán en los Servicios de Facultad que fueran habilitados para postgrados.”

sigue leyendo versión 3, la parte de nuevos pg, según el campo y el Servicio, buscar en el documento

retoma: Están básicamente hasta los sistemas de evaluación previstos: “se plantea que todas las especializaciones tendrán un eje común que contenga aspectos centrales de: epistemología, metodología e investigación en Psicología sigue leyendo los de especialización deberán contar con sistemas de evaluación muy rigurosos... (UBA)
Se habla de los docentes de las especializaciones como independientes, o sea, un llamado que no necesariamente implique una extensión de las estructuras de grado.
Habla de los criterios de ingreso, períodos de inscripción, fechas (risas)...

Intervención: Falta aprobarlo.

V.G.: bueno, yo creo que habría algunos puntos para ver, por ejemplo la necesidad de incluir mayor detalle de las maestrías y los doctorados, pero no es tan complejo. Acá entonces, lo que se necesita es que el Claustro de, una especie de luz verde a un grupo redactor de un reglamento y el mismo se haga.

Enrrico: Yo quería agregar algo. Nosotros les entregamos a los compañeros de la mesa algunas preguntas guías para ordenar el planteo y les dijimos que si querían las tomaran y sino, no. En general han respondido la mayoría de estas preguntas que formulamos.
Con respecto al por qué de los postgrados, me parece que hay una extensa argumentación que va desde el mercado en sí, la demanda de los propios psicólogos por los postgrados, la demanda de la sociedad, la legitimación en Facultad, entre nosotros y socialmente. Jerarquizar la docencia, la producción de conocimientos, la producción independiente necesaria de los conocimientos, la velocidad de los cambios de conocimiento, la captura o evitar la captura de los mismos en lo privado, reordenar los saberes.
De estos elementos es de los que yo haría una evaluación, ya que hay argumentos contundentes, de que no hay duda que hay que implementar, organizar y poner a funcionar los postgrados. Esto transversalizado en lo que, tomando a Guattari, en el capitalismo mundial y dado el neoliberalismo racional que estamos viviendo y que evidentemente marca un tipo de postgrados diferentes a otros momentos, seguramente.
Con respecto a los criterios entre Doctorado, maestría y especialización, hay distintas posiciones; en los Doctorados habría un nivel de libertad muy alto, similares a los que se plantearon. Con respecto a las maestrías se planteaban temas globales en grandes áreas, aparecía aquí también un nivel de coincidencia.
Con respecto a las especializaciones, habría una diferencia en torno a las corrientes o quizás en áreas de problematización. En los criterios mismos, tomaba nota acá, que volvía a aparecer lo que hablábamos del capitalismo mundial integrado, las necesidades sociales en torno a un Uruguay crítico en niveles de desocupación y las posibilidades de que a nosotros, como psicólogos, los postgrados también podrían reposicionar otros niveles de inserción y de trabajo.
Cómo implementar los postgrados. Bueno, traían los compañeros que en algunos lugares los planes de estudio se piensan desde los postgrados y que habría que integrar la política de postgrados y las políticas de plan de estudios, a la formación que requiere de ajustes periódicos, entonces, habría que instrumentar algunas formas de ir revisando y ajustando todo el plan de estudios y los postgrados también. La necesidad de una estructura y un reglamento que de cuerpo a la tarea de cómo implementarlo. En el cómo, aparecían abanicos amplios en torno a las especializaciones, un puñado de master y buscar la forma de implementar los doctorados que sería lo último que planteo Víctor.
Aparece el tema del dinero, viejo analizador de las organizaciones, pagos o gratuitos. Bueno acá hay distintas posiciones. Pagos en las actualizaciones, hay lugares en el mercado pagos, se planteó que otros niveles de los postgrados no sean pagos. Otro compañero planteó que sean pagos todos los postgrados y también se planteó la posibilidad de que algunos sean pagos y otros no. Vemos entonces como es conflictivo el tema del dinero. Yo percibí cierta coincidencia en algo que creo que obturó la discusión y creo que es el dinero, y pensaba algunas cosas antes de venir para acá. Pensaba que en las discusiones que se han dado en distintos momentos en Facultad, era como una falsa dicotomía, por un lado pidamos lo imposible, por otro pidamos lo posible. Pidamos el 100% así conseguimos el 50%. Yo creo que la cuestión que han ido planteando los compañeros, me parece a mí, es ¿qué necesitamos nosotros?. Pensemos todo lo que necesitamos, pensemos que queremos de postgrados, que tipo de postgrados, qué contenido, y yo creo que después, sí tenemos que pensar en cómo se pueden sostener financieramente. Pero no empezar por ahí, porque me parece un mal negocio empezar por el tema dinero, yo creo que hay que hacerlo por los otros objetivos y después vemos si hay posibilidades. Me parece también que no es bueno pensar qué plantel docente tenemos para los postgrados. Víctor tomaba algo, yo ponía acá “en cuanto a la organización interna de los postgrados en torno a la docencia, tenemos docentes en Facultad que pueden trabajar en torno al tema. Primero porque tenemos maestrandos, algo más de 10, tenemos menos doctorados. Pero además tenemos otras formas, porque en la UDELAR tenemos postgrados que pueden contribuir en Facultad de Psicología. En el país tenemos docentes que pueden contribuir, tenemos también en la región.
Después hay formas de estructura de los postgrados que son los seminarios y que estos no necesariamente tienen que ser postgraduados los que los den. Podemos tener invitados nacionales o del exterior, tenemos una serie de formas de convalidar sobre la base de la investigación, la producción y la práctica. Además hay una serie de compañeros de la Facultad y de la Universidad que no tienen especializaciones, no tienen maestría, que pueden ingresar en el plantel docente por la vía de la normativa.
Yo creo que tenemos muchas posibilidades, me parece que la gran batalla está en nuestras cabezas, en nuestra relación con los otros. En la legitimación más que en lo que tenemos.
La mayor preocupación que tengo en este momento es que si nosotros no podemos definir un plan estratégico de postgrados vamos en camino a la política del tun, tun, o de lo que vayamos armando a los golpes que a veces son necesarios, pero creo que no hay que detener el proceso por una gran estrategia de postgrados, pero no hay que dejar de hacerla.
Creo que a la hora de las implementaciones, tener un plan estratégico, permite entre otras cosas elaboración, ahí si me parece que van a tener que aparecer las priorizaciones temáticas, los recursos también, pero tener el plan estratégico armado nos da cierto oxígeno de perspectiva histórica.
Mi miedo, cuando comenzó esta discusión, era que, yo está posición la plantee cuando era claustrista, comenzaran solo los postgrados. El plan estratégico permite otras cosas, el decano que este o no este, los claustristas, los consejeros ya no son tan importantes sí tenés un plan estratégico. Es decir, no sólo se va a definir por correlaciones de fuerzas, movimientos y priorizaciones de los compañeros que están en los órganos, lo cual es muy importante porque va a haber, eso sí, es necesario que el demos se apropie de la discusión. Y como hoy veíamos, yo creo que ahí tenemos una dificultad para el plan estratégico.
Está muy reducida la discusión a los compañeros más activos de los órganos de cogobierno y de los gremios y hay que buscar, y lo digo como docente e integrante de ADUR, creo que nosotros tenemos que hacer algo, discriminar la discusión para que haya una apropiación colectiva y que no pase lo que pasa en otras partes del mundo, que hay un puñado de Doctorados. En Argentina es clave, la resolución tiene hasta nombre y apellido: Carlos Menen. En la maestría que yo curse en Mar del Plata, Susana Rudolf era la más veterana del equipo que iba con nosotros, pero para los argentinos era la pebeta porque así le decían los compañeros grados V de Mar del Plata, que tenían mas de 50 años y estaban haciendo la maestría porque si no quedaban afuera de la docencia porque fue una imposición política del gobierno. Creo que nosotros estamos en mejores condiciones de armar otras cosas mucho más interesantes.
Con respecto al documento, también hay algo que me preocupa y es que la Comisión de especializaciones que está compuesta por los 3 órdenes, pero el ingreso del docente a las especializaciones. A mí, que la comisión que presente un proyecto, un doctorado, cualquiera de especialización y es aprobado a sugerencia de la mismo y por el Consejo, pasa a ser el responsable e ingresa como un cargo docente, yo no estoy muy seguro si una Comisión compuesta por los 3 órdenes puede en los hechos conformarse en una comisión asesora de un llamado, no tengo claro eso.
Si bien hay un elemento muy clarificador y que es el consejo quien lo vota.

V.G.: Se puede hacer una Comisión independiente, habría que releerlo.

E.I.: Y lo otro es lo que vos decías Víctor, que estamos carentes de la parte de maestrías y doctorados, pero yo creo que acá hay un documento que hay que darlo vuelta, pelearlo, discutirlo pero es un mamotreto que tiene muchas horas de trabajo, lo que quiero decir es que tenemos una serie de condiciones pero antes, como decía Víctor, la demanda es sobre lo subjetivo y nosotros tenemos que pelear para que llegue al psicólogo.
Acá hay un plano que falla en nosotros y no me cabe la menor duda que no va a haber determinadas demandas de postgrados si no hay postgraduados. O sea, nosotros sabemos que producimos la demanda también, entonces, poder conquistar los postgrados para nosotros va a ser una posibilidad de construir demanda.

Intervención: Cuando ustedes decían si las maestrías iban a ser por áreas o por corrientes, yo pensaba, ya que en nuestra Facultad vemos mayor fuerza del Psicoanálisis ¿por qué los postgrados no pueden ser por áreas?. Yo estaba pensando que una determinada corriente no es la mejor para tratar con un determinado paciente y a lo mejor teniendo la diversidad de corrientes uno puede optar.

V.G.: Yo pienso que una currícula de postgrado podría tener opciones, por ejemplo un seminario sobre familia, puede tener opciones, hacerlo con un kleniano, un lacaniano.

Intervención inaudible.

V.G.: En los postgrados que tiene que ver con áreas emergentes, ese problema lo vas a tener, porque ninguna corriente lo tiene resuelto.

Joaquín Rodríguez Nebot: Además hay un aspecto de las situaciones y es que cada vez, se dan cuenta los paradigmas más fuertes de la dificultad para operar con la posmodernidad, con la modernidad tardía, o sea eso es real con el psicoanálisis, el psicoanálisis está en una profunda revisión de sus planteos y además el mismo psicoanálisis está abordando otras temáticas, otros campos. Lo mismo le pasa a la Guestalt, al psicodrama, lo mismo le pasa a otras corrientes. O sea que yo creo que la combinación de terreno, de temática con corrientes es lo que te genera un nudo problemático, eso es lo que hay que trabajar a nivel de políticas institucionales. Eso es lo que a vos te permite armar sistemas de elección, de créditos y vos podes armar una curricula propia, porque además en maestría y fundamentalmente en doctorado la curricula la propone, la arma el que propone el proyecto. Yo por eso pienso que las especializaciones están mucho más acotadas y además en lo personal me parece una cantidad enorme ese tipo de especialización, creo que el imperio de la medicina está pegando duro acá, en el sentido de que las especializaciones tiene que ser mucho más acotadas, más cortas, deben ser anuales, una buena carga de formación, de terreno digamos, pero no debe exceder las 300 horas o 400. no puede ser eso. Armar una especialización de 900 horas es prácticamente estar hablando de la mitad de una carrera ¿no?.
Una especialización para mí es una actualización, es una puntuación, es un punto, una especificidad muy alta, por ejemplo, yo que sé, “mediación en el ámbito escolar”, eso es una especialización. En el ámbito escolar, es algo muy específico, muy corto.
Especialización puede ser de pronto: “manejo del niño autista con la técnica conductivista”, esa es otra cosa específica, puntual. Mientras que las otras son mas macro, más de base, mas de investigación, académicamente también.
Las otras no están mas pegadas al ejercicio profesional, al terreno, mientras que las maestrías están mas relacionadas a la producción de conocimiento, investigación, o sea, para mí las maestrías y los doctorados son productores de conocimiento, mientras que las otras son reproductoras. A vos te enseñan una tecnología, te trasmiten conocimiento que después vos lo podes ahondar en una maestría o profundizar en una investigación y producir conocimiento. Pero lo que pasa es que claro, nuestra Universidad tiene una característica muy afrancesada mientras que las corrientes sajonas, digamos de las universidades europeas, tuvieron e hicieron carreras más cortas y luego doctorados. En EEUU se habla de postdoctorado. O sea en Francia y en los países latinos (en México no, yo sé porque estuve viviendo años allí y sé que tienen una formación muy similar a la norteamericana), la formación de base es muy amplia. Cuando yo digo todo lo que hacemos en nuestra licenciatura, la gente abre los ganchos así, nosotros tenemos una licenciatura macro, de base, que da a su vez una excelente base.
Entonces, por lo tanto para mí lo de los doctorados tendría que tener una licenciatura grande, con una carga horaria fuerte y que las especializaciones sean cortas. Y los doctorados, ahí si es donde vos echas toda la carne al asador, porque si no estamos armando un monstruo de hacer doctorados infinitos y especializaciones infinitas, y eso me preocupa.
Me parece entonces, que ese es un plan del diseño, y esa es una estrategia que hay que armar, pero me parece que el punto de la trancadera está entre los órganos de cogobierno. Y a mi entender obedece a dificultades de alto reconocimiento entre nosotros, de esquemas generacionales que se juegan muy fuertemente entre nosotros y que eso complica las cosas. Por otro lado creo que hay un nivel de lo del orden en general del lado del orden estudiantil, no hay una masa crítica de preocupación fuerte, de masa de gente que diga: “vamos a sacar esto adelante”, no hay una voluntad grande. Hay voluntad de determinadas personas que quieren sacar esto, pero no se conjunta la fuerza, la potencia como para poder sacarlo. Yo auguro, ojalá que saquemos el reglamento macro y se pueda diseñar una estrategia global que después independientemente de quiénes están puedan apoyarse, agarrarse de eso como nosotros nos agarramos del plan de estudios, me parece que eso es básico. A mí me parece que el informe es muy bueno, demasiado específico en determinadas cosas, hay que dar mayor libertad. Las comisiones que aprueban si bien deben estar conformadas, debe haber también comisiones notables, porque acá estamos hablando de investigación, entonces una comisión que dé el aval después, el Consejo que tiene 2 millones de temas a discutir no puede discutir un tema académico, entonces necesita mandar el proyecto y decirle: si, el proyecto tiene que ver con Laboral o con Organizaciones. Se lo pasa al profesor Leopold, que hará un informe donde lo tira a la basura o dice que está muy bueno, o que habría que hacerle un ajuste aquí o allá. O sea, también tenés que consultar a los docentes que vos tenés para que no te venga cualquiera y te meta el coso y digas: ¡Ah! qué bárbaro y cuando estés en el medio del camino digas: qué estamos haciendo acá adentro. Porque acá hay que darle una seriedad y me paree que para eso tenemos el otro problema y es el que tenemos pocos grados IV y V, y en esta Facultad de la que yo me retire como asistente académico en al año 96, lo dije, en esta Facultad con la carga horaria que tenemos de grado V y casi inexistencia de grado IV, que recién ahora tenemos algunos, estamos muy cerrados y entonces este problema queda reducido, a lo que Víctor ve como un problema en Argentina, a un grupúsculo, que hoy lo tenemos acá adentro. Entonces hay que agitar un poco la cabeza de la gente para ir a la reestructura jerárquica, como decía muy bien Luis, cuando puso este tema de la cuestión jerárquica docente y es un tema que hay que empezar a abrir, porque cuando vos tenés gente con los galones adecuados y además ya hay masa crítica para grados IV y V entonces tenés que alentar, porque si no estas orejeando la carta entre tres o cuatro, porque esta es la verdad de la milanesa, de lo que esta pasando.

L.L.: Yo quiero decir algo, que no tiene nada que ver, no sé si es una diferencia o una precisión con lo que una compañera planteo. Yo lo visualizo y esto lo digo porque yo no visualizo a esta Facultad como hegemonizada por el psicoanálisis. Me parece que hay que hacer una precisión entre lo teórico y lo teórico-técnico. Yo lo que creo es que la Psicología en el Uruguay tiene un soporte psicoanalítico que cruza todas las corrientes técnicas, y eso es muy difícil de producir. En un cuerpo teórico con este peso obviamente que te contrabandean todo, cosas que son utilizables por todas las corrientes técnicas y te contrabandean cosas que te encontrás repitiendo a alguna gente que no saben muy bien de donde vienen. Vienen del psicoanálisis pero las repiten. Yo creo que ese no es el caso de la Facultad de Psicología, me parece que acá se han desarrollado líneas que a mí me parecen muy ricas, muy buenas, que no hay una hegemonía técnica del psicoanálisis. Yo lo que creo es que hay muchas cosas buenas del psicoanálisis que sería bueno que no las tiráramos, que son soportes muy importantes en toda la red psicológica, ¿por qué digo esto?, porque se repite mucho que acá solo hay psicoanálisis y no es así, o por lo menos yo no lo veo así.

E.I.: Bueno si no hay más preguntas, estaríamos cerrando por acá, muchas gracias a todos los compañeros presentes

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